Adolphe Sax - Breve reseña sobre su historia y la del Saxofón

     

Hola a todos/as 

La semana pasada, el 6 de Noviembre, celebrábamos el 206 aniversario de Adolphe Sax, un genio como inventor y constructor de instrumentos musicales al cual le debemos todo lo que gira en torno a nuestro querido y maravilloso mundo del Saxofón. Es por ello que hoy venimos a realizar esta entrada haciendo mención y alusión a una breve reseña sobre su historia vinculada a un instrumento muy importante que marcó su vida y la nuestra, el Saxofón.  

Origen y causa de ver hecho realidad un sueño, la prodigiosa mente de Adolphe Sax (fabricante de origen belga y proveniente de una familia de tradición constructora de instrumentos musicales) verá materializada un día todas sus investigaciones, búsquedas e inquietudes en uno de los instrumentos llamados a ser Revolucionario a partir de la 2ª mitad del S.XIX. Este instrumento, el Saxofón, al cual le adjudica su apellido (Sax-phone = sonido de sax) no sería el único que inventaría y perfeccionaría a lo largo de su carrera.

De personalidad incansable y en su afán de mejorar y perfeccionar los instrumentos, Sax cuenta entre sus logros con un sinfín de mejoras e invenciones en numerosas familias instrumentales a lo largo de su carrera.

En el devenir del saxofón como tal, el propio Sax llevó a cabo varias evoluciones y mejoras a lo largo de su vida, que se vieron reflejadas en 3 patentes (1846,1866 y 1880) lo cual no significa que tras su muerte el saxofón no continuara su camino, de manos de otros fabricantes. 

El saxofón integra una familia formada por siete miembros: sopranino, soprano, alto, tenor, barítono, bajo y contrabajo. Todos tienen una digitación similar pero cada uno tiene sus propias características constructivas y sonoras. 

En 1840, aún en el taller de Bruselas, encargado de dirigir el taller paternal, tenía un sueño que quería hacer realidad algún día. Este sueño se trataba de crear un instrumento de viento que se aproximara a las características de la voz y de los instrumentos de cuerda, pero con más fuerza e intensidad. Según palabras de J.M Londeix en su libro conjunto con otros autores “El Saxofón”. Es de esta forma como construye en 1840 el Saxofón, que a diferencia de casi todos los otros instrumentos, no tiene antecedentes, es aparecido tal cual en medio del siglo XIX. 

Sería en 1841 cuando lo daría a conocer por primera vez en forma de Saxofón Bajo delante de la comisión de la 1a Exposición de la Industria belga. Fabricado de cobre y en forma de cono parabólico, embocadura de caña simple y digitación similar a la flauta o el clarinete. 

No sólo se dedicó a la construcción y fabricación de saxofones, puesto que de sus talleres surgieron numerosas patentes para instrumentos de viento, a este se le atribuyen entre otras, la invención del fliscorno, perteneciente a la familia de las trompetas, y del bombardino, instrumento de la familia del viento metal.

En ese momento el saxofón tuvo una rápida aceptación especialmente en bandas militares y captó la atención de los compositores románticos del momento como por ejemplo Berlioz. 

En 1844, dos años más tarde de su llegada a Paris, Berlioz decide dedicarle sus primeras notas en un Himno Sagrado para los instrumentos creados por Sax. Se trata de una transcripción de una obra vocal del propio compositor en formación de Sexteto de viento, llamada Chant Sacrè. El saxofón aparece en forma de Barítono y es interpretado por el propio Sax el día de su estreno en la sala Hertz en Paris. 

Será en el año 1846 cuando tenga lugar la aparición de la primera clase de saxofón en el Gimnasio para músicos militares en Paris. Según M. Asensio Segarra en su libro “A. Sax y la fabricación del Saxofón” como consecuencia de no tener la nacionalidad francesa, Adolphe sax no pudo optar a esa plaza de profesor y fue asignada a Jean- François Barthélemy Cokken, fagotista que se encargaría de enseñar en la clase de saxofón. Pero es a causa de la Revolución de 1848 y de la 2ª república que pondría fin a la clase de saxofón. 

Es a través de una decisión ministerial, cuando en 1857 se crean unas clases paralelas a las del Conservatorio de Paris. La clase de saxofón sería encargada a Adolphe Sax, la cual estaría compuesta por 7 alumnos y se irían incrementando con el paso de los años hasta formar a unos 130 saxofonistas entre 1858 y 1870 de los cuales 26 de ellos obtendrían un primer premio en el Conservatorio de Paris.

El saxofón corrió el riesgo de ser olvidado especialmente a partir de los años 1870, en la que dicha cátedra fue cerrada por razones económicas. Años más tarde, el instrumento iría adquiriendo con el paso del tiempo y las distintas modificaciones realizadas, numerosas mejoras en su mecánica y en sus llaves. A partir de la década de 1920 y con el nacimiento del jazz en pleno apogeo, el saxofón volvería a renacer al servicio de una música y de unos intérpretes que llevarían las cualidades y sus innumerables bondades musicales del saxo a sus mejores momentos de expresividad.